Bárbara Rey llega a un acuerdo y acepta una condena de dos años de cárcel por alzamiento de bienes

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Bárbara Rey a su salida

de la Audiencia Provincial de Madrid, el 6 de marzo de 2024.JOSÉ OLIVA

(EUROPA PRESS)



Bárbara Rey ha evitado la cárcel al aceptar un acuerdo de

condena de dos años de prisión de cara al juicio en el

que estaba acusada de alzamiento de bienes. Este jueves 7

de marzo se ha conocido que la artista, de 74 años, ha

alcanzado un acuerdo con la Fiscalía en el que reconoce

los hechos para ver así rebajada sensiblemente la pena de

tres años y medio de cárcel que pedía para ella el Ministerio

Público por haber eludido el pago de 143.902 euros.

Según han informado a la agencia Efe fuentes jurídicas,

también han llegado a un acuerdo con la Fiscalía los dos

hijos de la artista, una hermana y otros tres acusados en la

misma causa: los tres familiares y otro procesado han

aceptado un año de cárcel como cooperadores del delito, y

los otros dos acusados 11 meses de cárcel como

cómplices. Para todos ellos se aplica la atenuante simple de

dilaciones indebidas y la atenuante analógica de reparación

del daño.

El acuerdo se ratificó en una vista judicial celebrada este

miércoles 6 de marzo en la Sección Sexta de la Audiencia

Provincial de Madrid, que no trascendió hasta hoy, y evitó

que se llegara a celebrar el juicio, que ya había sido

suspendido el pasado 16 de junio porque uno de los

procesados estaba en paradero desconocido. La

exvedette —que en 1979 fue imagen de la nueva ley del

impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF)— y

su hija Sofía, acompañadas por un familiar, acudieron ayer

a primera hora de la mañana a la sede de la Audiencia

Provincial para asistir a la vista oral, a cuya prueba

renunciaron las partes como consecuencia del acuerdo de

conformidad alcanzado con la fiscal del caso. Apenas

estuvieron cinco minutos en la sala de vistas, donde madre

e hija se limitaron a reconocer los hechos. El hijo de la

artista, Ángel Cristo, en cambio, no acudió al encontrarse

fuera de España ya que está a punto de participar en

el reality Supervivientes.

La Fiscalía pedía en sus conclusiones provisionales tres

años y seis meses de prisión para Bárbara Rey y dos años

y medio para sus dos hijos, su hermana y los otros tres

acusados de alzamiento de bienes en operaciones

financieras para eludir pagos a Hacienda por el impuesto

sobre la renta de las personas físicas (IRPF) por un total de

143.902 euros.

El Ministerio Público sostiene en su escrito de acusación

que la exvedete llevó a cabo dichas operaciones, en las

también intervinieron los demás acusados, para simular que

no podía pagar el dinero que le reclamaba la Agencia

Estatal de Administración Tributaria (AEAT).

Los hechos se remontan al 10 de mayo de 2011, cuando

Hacienda comenzó una inspección a la artista en relación al

pago del IRPF de los periodos fiscales comprendidos entre

2006 y 2008. Según la Fiscalía, el 16 de noviembre de 2012

se dictaron sendas actas por el IRPF, la primera de 2006 y

la segunda de 2007, por importes de 135.031 y 131.568

euros, respectivamente. Explica que dichas actas fueron

notificadas a Bárbara Rey el 12 de febrero de 2013 y tenían

de plazo de ingreso voluntario el 20 de marzo de ese año.

De ahí que el 18 de julio se dictaran sendos acuerdos de

imposición de sanciones en ambos expedientes por

importes de 51.496 y 60.6756 euros, respectivamente,

notificados a la acusada el 8 de agosto de 2013.

“A sabiendas de que habían dado comienzo las labores de

investigación de Hacienda, la acusada, con ánimo de eludir

dicha responsabilidad de pago, se puso en contacto con

varios familiares para actuar en connivencia para llevar a

cabo actos de disposición patrimonial con la finalidad de

generar la quiebra de las deudas contraídas”, señala la

Fiscalía, cuya acusación es ahora corroborada por los

acusados. La Fiscalía detalla un total de 13 operaciones en

las que tomaron parte sus dos hijos, su hermana y otras

personas con la finalidad de provocar una situación de

indefensión económica por parte de la acusada “que

imposibilitara satisfacer los créditos reclamados por la

AEAT, al no haber habido bienes bastantes a tal fin por la

situación de insolvencia creada por los acusados”. A fecha

de 19 de diciembre del 2017 existía un saldo de deuda

pendiente de ingreso de 143.902,24 euros.